Otra gran sorpresa fue ver este número a finales de 1989. Fue mi primer comic de X-Men. Tenía muchos atractivos: era dibujado por Jim Lee (quien se volvería una gran figura del medio), parte de la historia de Actos de Venganza en la que los superhéroes peleaban contra villanos a los que normalmente no confrontaban; en este caso, Wolverine peleaba contra Mandarin (quien es enemigo de Iron Man). Para ese entonces, no existían muchas publicaciones de X-Men en México. Había una revista, El Hombre Araña Presenta, que comenzaba a editar historias clásicas de X-Men pero con una alineación totalmente distinta ya que tenía más de dos décadas de retraso. Sin embargo, el argumentista era el mismo: Chris Claremont.
También encontré personajes que no conocía, como Psylocke, Jubilee o Forge pero salían viejos conocidos como Banshee o Moira McTaggert. Desde entonces, no he dejardo de coleccionar este título y tengo de corrido desde el 244, llegando hasta el 544. En realidad, me falta la primera aparición de Gambit, en el 266. Algún día...
¡Vaya manera de comenzar a coleccionar a los X! Cómo extraño a Chris Claremont...
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